Son los jugadores del pueblo
Los tributos a Scaloni en Pujato y a Julián Álvarez en Calchín mostraron la pura esencia de dos campeones del mundo que nunca se van a creer próceres y vuelven allí por afecto.
Los tributos a Scaloni en Pujato y a Julián Álvarez en Calchín mostraron la pura esencia de dos campeones del mundo que nunca se van a creer próceres y vuelven allí por afecto.